Las pupilas negras se incrustan en la soledad negra
del azul circular del sabio
y un hombre grande borracho
sin afeitar
(que parece un tanque)
me muerde a la fuerza las uñas
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Mientras avanza dibujando una y otra vez
con sus pisadas círculos estrechos,
el movimiento de sus patas hábiles y suaves
va mostrando una rotunda danza,
en torno a un centro en el que sigue alerta
una imponente voluntad.
RILKE
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Re acciona