Ex 7, 17
"En esto conocerás que yo soy Jehová:
he aquí, yo golpearé con la vara que tengo
en mi mano el agua que está en el río,
y se convertirá en sangre."
Sabes
que al final de esta llanura
te espera la arena ajada
aunque las sombras de las nubes
pretendan ser árboles
Sabes
que tus ojos de hombre
no pasarán
de aquel tronco postrado y muerto
petrificado
Sabes
todo sobre la aniquilación
por eso no haces caso
a la zarza en llamas
y corres
vivo
hasta donde no llegue su luz
Esconderse suele ser gratificante. Te lo dice una muy aficionada al juego del escondite.
ResponderEliminarA veces lo es :-)
ResponderEliminarPero en este poema, huir de la luz que desprende la zarza en llamas no implica esconderse, es huir a través y hacia campos más abiertos